Las personas inteligentes no son brillantes en la mayoría de las áreas de su vida, porque son las personas con un talento único que es mucho más superior a la gente común. Muchos de los mejores poetas, filósofos y científicos llevan una patética vida personal porque son incapaces de desarrollar una buena relación con otras personas que son muy diferentes de ellos.
Imagine un hombre cuya altura es de 2.4 metros, mientras que la altura promedio de los otros hombres en la sociedad es 1.70 metros. Este hombre puede ser tan extraordinariamente alto que su nombre puede estar en el Guinness Book of World Record, pero difícilmente puede encontrar ropa adecuada para él. Apenas puede viajar en automóviles y trenes. Apenas puede tener una relación. Lo mismo se puede decir de las personas que son extraordinariamente pequeñas o extraordinariamente gordos o delgados.
El mayor problema con la gente altamente inteligente es que su enfoque en su área de brillantez trunca sus otros talentos. Se vuelven mucho peores en otras áreas de inteligencia. Por ejemplo, Albert Einstein es considerado como el mayor científico del siglo XX, pero también fue conocido por su pobre memoria.
Einstein viajaba en un tren en Alemania. Para entonces, se había convertido en un investigador famoso. El conductor entró en el vagón, y Einstein buscó desesperadamente en los bolsillos el billete.
-Oh, pero le reconozco, por supuesto, doctor Einstein -dijo el conductor-. No se preocupes por el billete. Puede viajar gratis.
-Gracias -dijo Einstein. Pero si no encuentro mi billete, no sabré dónde bajar del tren.
La vida personal de Einstein no fue precisamente buena.
Einstein se casó con Mileva Maric el 6 de enero de 1903.
La crisis se produce en 1914, cuando Albert acepta un empleo en Berlín; Y Mileva, al principio, se negó a unirse a él. Finalmente, se unió a él en abril y Albert entregó una larga lista de reglas a Mileva para seguir. En julio, la situación no funcionó y ella llevó a los niños de regreso a Zurich.
En 1916, Mileva le exige el divorcio, colapsa emocionalmente y es hospitalizada. Mileva finalmente acepta un divorcio, con la condición de que si Einstein gana el premio Nobel, el dinero sería de ella.
A partir de 1917, Einstein empezó a padecer varias enfermedades debidas a debilidad general. Esto continuó hasta 1920. A lo largo de este tiempo estuvo bajo el cuidado amoroso de su prima Elsa Loewenthal. El 2 de junio de 1919, se casaron.
En diciembre de 1936 Elsa murió. En 1939, su hermana Maja se trasladó a su casa donde permaneció hasta su muerte en 1951.
En sus últimos años, Albert Einstein se divirtió diciendo chistes a su loro, y evitó visitantes, fingiendo sentirse mal.
Einstein fue un hombre que una vez dijo que se había vendido cuerpo y alma a la ciencia. Pero el gigante científico seguía siendo en muchos aspectos como el resto de la humanidad. Tenía un lado humano también, con todas las debilidades y debilidades humanas bien conocidas.
“Tal genio debe ser irreprochable en todos los aspectos”, escribió Elsa una vez sobre su marido en una carta. “Pero la naturaleza no se comporta de esta manera, donde ella da extravagantemente, se lo lleva extravagantemente. ”
No es tan bueno ser extraordinariamente inteligente. Los genios tienen que pagar un precio muy alto por serlo.
fuente: gutenberg.rocks
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